lunes, 28 de septiembre de 2015

Alzhéimer

Neurodegenerativa e irreversible, esta enfermedad no es una consecuencia natural del envejecimiento, sin embargo, es la principal causa de demencia en los mayores. Conoce cómo vivir con alzhéimer.
Escrito por Natalia Dudzinska Camarero, Bióloga
Revisado por Dr. Pablo Rivas, Especialista en medicina interna

La enfermedad de Alzheimer es una patología neurodegenerativa cerebral, progresiva e irreversible. Afecta de forma difusa a las neuronas de la corteza cerebral y otras estructuras adyacentes, y lleva a una degeneración de la función cognitiva y a trastornos conductuales.
El alzhéimer se caracteriza por un deterioro de la capacidad del sujeto para controlar sus emociones, desenvolverse en su entorno de acuerdo a unas pautas de conducta normales, y coordinar adecuadamente sus movimientos y memoria, entre otros trastornos.
Por lo general, suele hacer su aparición a partir de los 65 años –aunque también puede darse en personas más jovenes–. Se trata de una enfermedad en la que la familia y el entorno del afectado juegan un papel fundamental, tanto en la identificación temprana de posibles síntomas que ayuden a realizar un diagnostico precoz, como en el cuidado y manejo posterior del paciente.

Incidencia y prevalencia del alzhéimer

Se trata de la forma más común de demencia (supone el 60% de todos los casos de demencia), y afecta a cerca de 36 millones de personas en todo el mundo. La prevalencia alcanza al menos el 30% de la población que supera los 85 años. Siendo mujeres cerca del 70 por ciento de los afectados de entre 65 y 90 años.
Además, debido al incremento en la esperanza de vida, se calcula que el número de personas con alzhéimer se triplique en los próximos 40 años, llegando a padecerla unos 113 millones de personas, de ellos 1,5 en España, según datos recientes de la Sociedad Española de Neurología (SEN). En la actualidad hay 600.000 afectados en nuestro país, diagnosticándose anualmente 40.000 nuevos casos, sin embargo, los expertos en neurología estiman que alrededor del 30-40% de los casos podrían estar sin diagnosticar, sobre todo porque tan solo están identificados dos de cada diez casos que aún están en fases más leves. El objetivo de todos pasa pues por concienciar a la sociedad y reducir el número de pacientes diagnosticados en las fases más avanzadas.

Recomendaciones para vivir con alzhéimer

Una vez que se ha diagnosticado la enfermedad de Alzheimer comenzará un proceso muy difícil, tanto para el enfermo como para las personas que le rodean (más si cabe para estas últimas). Todo el entorno del enfermo, la casa y la familia, deberá ser reorganizado para evitar cualquier tipo de lesión, para facilitar el manejo de situaciones complicadas, y para asegurar una calidad de vida adecuada al paciente y a sus cuidadores. 
Se deben adoptar medidas destinadas a: 
  • Evitar caídas: hay que asegurarse de quitar todo aquello con lo que sea fácil resbalar, eliminar obstáculos que dificulten el desplazamiento, evitar que los cables arrastren por el suelo, asegurar un buen alumbramiento de las estancias, etcétera. En caso de que fuese necesario, existen andadores adaptados que se pueden conseguir en centros de ortopedia. 
  • Evitar accidentes: es importante retirar de la circulación todo tipo de materiales cortantes, inflamables y tóxicos. Es recomendable equipar la bañera con barras que faciliten la entrada y salida de la misma, y con bandas antideslizantes. Instalar seguros en ventanas y puertas, y no dejar nunca solo al paciente en lugares como terrazas, escaleras, y otros lugares que puedan resultar peligrosos para él. Es muy recomendable tener siempre a mano el número de teléfono del servicio de urgencias o centro de salud más cercano. 
  • Organizar el entorno: en general se debe intentar simplificar la disposición de la casa y de los objetos, no dejar nada que pueda caerse con facilidad o con lo que se pueda tropezar. Además, es conveniente no cambiar las cosas de sitio para no desorientar al enfermo. Es bueno indicar el recorrido desde el dormitorio hacia el baño y la cocina, y se pueden colocar carteles con el nombre (y a ser posible un dibujo sencillo) de estas estancias en la puerta. 
  • Actividades cotidianas: ya desde las primeras etapas de la enfermedad se debe crear una rutina y seguirla lo más fielmente posible; lo que ayudará al enfermo a orientarse en el espacio y en el tiempo. Esto también se puede conseguir facilitando al paciente el acceso a un calendario donde este pueda ir tachando los días, elaborando una lista de actividades, o situando a la vista un reloj que el paciente comprenda (normalmente les resulta más fácil interpretar los relojes digitales). 

Consejos para familiares de pacientes con alzhéimer

La familia va a vivir y sufrir con el enfermo de alzhéimer todo el progreso de su enfermedad. Los cambios que van a ocurrir a partir de este momento supondrán en muchos casos la aparición de ciertos sentimientos negativos (depresión, miedo, ansiedad, culpabilidad…), y un nivel de estrés y desgaste, tanto físico como psicológico, que van a dar lugar a lo que se ha denominado “síndrome del cuidador”. 
Para evitar que la persona que asume el papel principal de cuidador sufra este trastorno debe, en primer lugar, estar informada y recibir algún tipo de formación que la oriente en el desarrollo de su función. En segundo lugar, debe saber que dispone de ayuda siempre que la necesite, apoyo psicológico, social y familiar.
Por último, y no menos importante, el cuidador debe tener tiempo para descansar y poder realizar actividades fuera del entorno del enfermo. En definitiva, no se debe olvidar que tan importante como el bienestar del paciente es el mantenimiento de la calidad de vida de las personas que le rodean.

miércoles, 23 de septiembre de 2015

Terapia ocupacional

Desde el departamento de Terapia Ocupacional, se valoran las capacidades y problemas físicos, psíquicos, sensoriales y sociales de las personas y se establece un tratamiento mediante el uso terapéutico de actividades (actividades básicas de la vida diaria, instrumentales y ocio) para, mantener o aumentar la independencia, reforzar el desarrollo y prevenir la discapacidad.




lunes, 21 de septiembre de 2015

La felicidad de las personas mayores depende más de una actitud positiva que del estado físico


El estado de salud deja de ser sinónimo de un envejecimiento óptimo


Una actitud positiva ante la vida proporciona mayor felicidad en la vejez que el estado de salud, según una investigación desarrollada por la Universidad de California en San Diego. El estudio pone de manifiesto que el optimismo y la actitud de “hacer frente” a las cosas son más importantes para conseguir un envejecimiento feliz, que las mediciones tradicionales de salud y bienestar. Una nueva percepción del envejecimiento que pone fin a la creencia de que el buen estado físico es sinónimo de un envejecimiento óptimo. Por Marta Morales.




La felicidad en la vejez depende más de una actitud positiva que de la salud que se tenga, señala un estudio realizado por el Sam and Rose Stain Institute for Research on Aging (SIRA), perteneciente a la Universidad de California en San Diego. El estudio llama la atención por la inusual consideración de criterios subjetivos para evaluar el estado del envejecimiento.

En esta investigación se examinó a 500 voluntarios de edades comprendidas entre los 60 y 98 años, que vivían independientemente y que habían padecido diversas enfermedades, como el cáncer, fallos cardiacos, diabetes, problemas mentales u otro tipo de disfunciones.

Tal como explica al respecto la revista Medicalnewstoday, a los participantes en el estudio se les pidió que evaluaran su envejecimiento en una escala del 1-10, siendo 10 un grado de buena calidad de vida en la vejez.

La media de esta valoración entre los encuestados fue de 8.4, lo que desvela la actitud positiva dominante respecto a cómo vivían su envejecimiento. Menos del 10% de los entrevistados asociaban la calidad de su envejecimiento con el estado de salud corporal.

Lo más sorprendente de los resultados obtenidos, sin embargo, fue que los voluntarios más optimistas –aquellos que pensaban que estaban envejeciendo bien- no siempre coincidían con los que tenían mejor salud.

Ver con buenos ojos la vida

La investigación, llevada a cabo por el profesor Dilip Jeste, de dicha Universidad, y sus colegas, señala que el optimismo y la actitud de “hacer frente” a las cosas son más importantes para conseguir un envejecimiento exitoso que las mediciones tradicionales de salud y bienestar. Es decir, que el estado físico no es sinónimo de un envejecimiento óptimo. Por el contrario, una buena actitud es casi una garantía de un buen envejecimiento.

Suele considerarse normalmente que una persona “envejece bien” si tiene pocas dolencias o si sigue manteniendo más o menos sus facultades, si bien no existe un consenso en la comunidad médica a la hora de definir con exactitud lo que puede entenderse como un envejecimiento adecuado.

Este estudio demuestra que la percepción que se tiene de uno mismo puede ser incluso más importante que el estado físico, a la hora de considerar que el envejecimiento se está desarrollando adecuadamente. La salud física ha dejado de ser de esta forma el mejor indicador de un envejecimiento adecuado, según este estudio.

Otra conclusión que se desprende de este estudio es que la preocupación de las personas que adentran en edades avanzadas no debe centrarse tanto en el estado de salud como en el cuidado y cultivo de actitudes positivas, ya que estas actitudes pueden ser más importantes que el estado de salud corporal para alcanzar el envejecimiento adecuado.

La investigación también ha demostrado que la gente que pasa algo de tiempo cada día socializándose, leyendo o participando en otras actividades de ocio, tienen un nivel de satisfacción más alto en la vejez.

Los resultados de esta investigación no han sido publicados todavía, pero fueron dados a conocer en la asamblea annual de la American College of Neuropsichopharmalogy, celebrada esta semana en Waikoloa, Hawaii. La ACNP, fundada en 1961, es una organización profesional de más de 700 científicos, entre los que se encuentran tres premios Nobel. Su misión es prevenir enfermedades del sistema nervioso mediante el estudio del cerebro.

Buen estado de salud mental

Dilip V. Jeste, artífice de esta investigación, es profesor de psiquiatría y neurociencia en la Universidad de California. Está especializado en geriatría psiquiátrica y es el editor del American Journal of Geriatric Psychiatry.

Además, Jeste es jefe de la División de Geriatría Psiquiátrica de la mencionada Universidad y participa en numerosas actividades de investigación, preparación y cuidado de pacientes de la tercera edad. En una entrevista publicada el pasado septiembre por Medscape, explica entre otras cosas los mecanismos que permiten un envejecimiento exitoso.

Junto a su colega Gregory Stain en el Sam and Rose Stain Institute for Resarch on Aging (SIRA), también perteneciente a la universidad de California en San Diego, Jeste ha desarrollado otras investigaciones entre las que descaca un estudio sobre la misma temática.

En este estudio participaron 1.000 voluntarios seniors que viven en California, los cuales rellenaron un completo cuestionario acerca de su nutrición, su historial médico, hábitos de ejercicio y, en general, su estilo de vida. Asimismo, muchos de esos participantes facilitaron muestras de sangre para que se pudiera conocer su estado de salud. Los primeros resultados de este estudio señalan también que un mal estado físico no tiene por qué desembocar en un envejecimiento negativo.

A partir de estos resultados, Jeste y se equipo pretenden continuar analizando las causas de las diferentes percepciones sobre el envejecimiento, ya que estudios previos han demostrado que el mantenerse activos y el realizar ejercicio físico habitualmente ayuda también a envejecer en buen estado corporal y mental.

Otra prometedora área de investigación en la que el Jeste y el SIRA pretenden profundizar es la del cerebro, puesto que diversos estudios han adelantado ya que puede que haya neuronas que sí se regeneran, a pesar de la edad.

De esta manera, Jeste pretende descubrir por qué hay personas que, con 80 ó 90 años de edad siguen perfectamente activas, tengan o no achaques, y de qué depende el estar bien la mayor parte de tiempo que podamos de nuestra vida. 

viernes, 18 de septiembre de 2015

¡Bienvenid@s!


Bienvenidos al blog de la residencia de ancianos Sagrados Corazones. Entra y conócenos. Para cualquier consulta ponte en contacto con nosotros. Esperamos compartir con tod@s nuestras vivencias.

miércoles, 16 de septiembre de 2015

Documental "Me llamo Carmen"





¿Cómo quieren ser cuidadas las personas mayores? 

Un vídeo muy recomendable tanto para familiares, amigos, trabajadores, etc... que día a día formamos partes del entorno de los mayores.
Realizado por el centro gerontológico El Buen Samaritano, de Cáritas en Málaga....Disfrútenlo!

lunes, 14 de septiembre de 2015

Santo del día: Exaltación de la Santa Cruz (14/09/2015)

Este día nos recuerda que Santa Elena halló la Santa Cruz en el año 320. Este símbolo es fruto de la libertad y amor de Jesús, que la quiso para mostrarnos su solidaridad con el dolor humano. Jesús no ha venido ni a suprimir el sufrimiento ni para explicarlo, sino, para acompañarlo con su presencia. En toda su vida Jesús no hizo más que bajar: sólo sube para ir a la Cruz. Y en ella está elevado para que le veamos mejor y para compartir nuestro dolor solidariamente. La Cruz es un signo más y enriquece. Es la ambigüedad del dolor. El que no sufre, queda inmaduro. El que lo acepta, se santifica. El que lo rechaza, se amarga y se rebela.

jueves, 10 de septiembre de 2015

Se acerca el final del verano....

¡Hola! 

Ya se va despidiendo el verano para dar la llegada a una nueva estación...el otoño.
Desde la residencia ya estamos preparando todo para dar comienzo a un nuevo curso de trabajo y despedirnos de esta época tan estival.

Pronto empiezan los paseos matutinos de nuestros residentes bajo el sol otoñal, las actividades pastorales, el reencuentro con profesionales, la vuelta de los viajer@s, etc... 

Ya empezamos a juntarnos todos y volver construir nuestro futuro más inmediato.

¡Feliz final del verano!






Vía-lucis

 ¡Paz y Bien amig@s!     CRISTO VIVE ¡HA RESUCITADO! Sí, Cristo Vive, y vive dentro de cada uno de nosotros. El pasado viernes de Pascua no...